¿Malas noticias para César Strawberry?
Leemos hoy en El País que el Tribunal Supremo se ha pronunciado por primera vez sobre el enaltecimiento del terrorismo a través de las redes sociales y ha condenado un año de cárcel —rebajando 1 año la pena impuesta por la Audiencia Nacional— a una joven estudiante que difundió a través de Twitter mensajes en los que se burlaba de víctimas de ETA. Algunos de los comentarios de esta chica fueron “Viva ETA” o “La lucha es el único camino. Dale duro hasta ganar” y después chistes típicos como:
“¿De qué tiene la frente morada Irene Villa? De llamar a las puertas”; “¿Cómo monta Irene Villa a caballo? Con velcro”; “¿En qué se parece Miguel Ángel Blanco a un delfín? En el agujero de la nuca”; “¿Qué le regalarán al sobrino de Miguel Ángel Blanco por Navidades? Un tiovivo”.
El tribunal considera que los comentarios de la joven se enmarcan dentro del discurso del odio: “Comportamientos de ese tenor no merecen la cobertura de derechos fundamentales como la libertad de expresión o la libertad ideológica, pues el terrorismo constituye la más grave vulneración de los derechos humanos de la comunidad que lo sufre”. Los comentarios de César Strawberry en Twitter no fueron tantos ni de lejos y creo que no tienen nada que ver ni en forma ni en fondo con los de este caso, pero yo no soy juez, ni siquiera soy de letras.
También tenemos el caso de Pablo Hasél, que en 2015 fue condenado a dos años de prisión por enaltecimiento del terrorismo por el contenido de sus letras, en concreto por 10 canciones subidas a Youtube.
Más información en El País.
#FreeStrawberry
Enviado por agradecido el 14.07.16