Sobre el concierto de Lichis ayer en Madrid
15.05.08 | Por Chivo
Ver al Lichis cantar El Tren, de Leño, sirve para: 1.- Dar envidia, mucha envidia, a Lucía. 2.- Comprobar que uno de los mejores cantantes y letristas sigue disfrutando encima de un escenario. Aunque, siendo precisos, lo de ayer en el Buho Real de Madrid era más bien una tarima. Dos horas de concierto acústico en las que el Lichis estuvo muy cercano. Acompañado por Pepo López, a la guitarra, y por apenas 60 personas, el líder de La Cabra Mecánica se sentía en su salsa. Después de uno, dos, tres, cuatro... chupitos en vaso ancho, Lichis se entregó a la rumba, al rock, a las versiones. Se cachondeó de/con Andrés Calamaro, de quien se puso a cantar a modo de deshueve Te quiero; o de Melendi: "Estar de viaje permanente no quiere decir que me gusten los aviones como a él". Un humor muy sano, con la pizca de maldad necesaria para sobrevivir.