A mí lo que me asombra, más que preocuparme, es que los revolucionarios la tomen con los antidisturbios, que es un cuerpo pensado para repeler a las turbas y preparado para ello, en vez de ir a por sus ídolos de la tele por tomarles el pelo cada día y distraerles con eventos deportivos, ya que son los verdaderos responsables de que la gente vote lo que se vota en España.
Durante la travesía de la Marcha por la Dignidad los andariegos han tenido que soportar los hostigamientos con el compromiso al consenso de no-violencia, conscientes de que cualquier respuesta a las provocaciones sería utilizada en su contra. Lo que el gobierno no les pudo sacar se lo han regalado los colectivos pro-violencia.
Tomad fútbol, televidentes:
