Josetxu Piperrak. “La Ley en este país se antepone al sentido común”

Noviembre de 2018. Un entrevista de Rubén Rozas

“Solo el pueblo salva al pueblo”. Entonces, ¿qué nos queda a nosotros, periodistas? Con esta constante rondándome en la cabeza y libreta en mano me dirijo a por Josetxu Piperrak & The Riber Rock Band, el nuevo proyecto en el que sin saber muy bien cómo se encuentra inmerso el ex de Piperrak.

Aunque el motivo principal del encuentro es el primer disco de la banda; Gritando otra vez, mi manía de jugar a ser un profesional de la comunicación y la implicación social del grupo terminarán por dar como resultado una conversación en la que, además de “música” aparecerán otros conceptos como “libertad de expresión”, “presos políticos”, “Alsasua” o “Vox”. Una entrevista a un todo o nada en pos de la verdad; un intento por escapar de la jungla mediática intoxicada, y ¿por qué no?, la respuesta a esa dichosa pregunta que de un tiempo a acá me atormenta.

¿Qué parte de Piperrak conserva Josetxu Piperrak & The Riber Rock Band?

Josetxu.

¿Musicalmente?

Prácticamente ninguna. Piperrak era una cosa y nosotros otra.

A pesar de la experiencia que os acredita. ¿No notáis qué empezáis de cero?

De algún modo sí. Es una sensación que, creemos, acompaña a cualquier músico que vuelve, ya sea con el mismo grupo con el que se despidió o con otro.

Cuando Piperrak estaba en activo se baja durante ocho años de los escenarios. ¿En qué inviertes ese tiempo?

En nada; de hecho no me planteaba volver; es más, tras la disolución de Piperrak es Josito quien me llama un día y me propone unirme a ellos. Aunque tampoco me prometí no hacerlo, de ser así le habría dicho que no. “No me planteaba volver, aunque tampoco me prometí no hacerlo”

¿O sea en ninguno de los parones existe una razón de peso?

No, simplemente tomé la decisión.

¿Y en este último caso dices que son ellos los que te buscan a ti?

Así es. Josito (guitarra) me llama un día porque se habían quedado sin cantante, y a partir de ahí nos empezamos a juntar para tocar. De hecho; en un principio lo utilizábamos solamente como hobbie, hacíamos versiones y poco más.

Hablando de versiones, ¿para cuándo una de “Kualquier día” con Boikot?

Alguna vez la hemos tocado juntos; lo que pasa es que hacen un popurrí en esa canción con el que yo me pierdo y prefiero salir por patas. (risas)

¿Qué se va a encontrar la gente en este primer disco?

Doce temas de punk rock, con la voz de Josetxu. sin turutas, ni“lo, lo, los”, implicación social, y algún guiño al pasado.

Aclaradme eso último.

Nuestra canción favorita del disco; Mi generación, es un homenaje a los 80, a las personas que perdieron la vida por la heroína, y a sus familias.

¿Tenéis ya la gira programada?

Los temas administrativos los lleva El Dromedario, te podemos decir que empezamos en México y Colombia, que a final de año estaremos en Barcelona y en Madrid, y que tocaremos también en la Jimmy Jazz de Vitoria, con Gatillazo.

¿Qué tal suele ser el recibimiento en Latinoamérica?

Brutal, la verdad.

He leído que no os dejaron tocar en Chile.

Solamente conocemos el aeropuerto de Santiago (risas).Todavía no tenemos muy claro qué fue lo que pasó. Nos dejaron allí retenidos doce horas y de repente llegó un señor encorbatado y le preguntó a Josetxu: “¿Tú en contra de qué cantas?” y él respondió : “En contra de muchas cosas y a favor de otras”, y nos enviaron de vuelta a casa. Todo muy raro. Después de esto en México desconfiaban y casi nos pasa lo mismo, pero allí finalmente nos dejaron hacer las fechas.

¿O sea os tiraron por el mensaje de vuestras letras?

Creemos que fue más un tema entre promotores. Sea como fuere no querían que tocáramos, hasta tal punto era así que la sala salió ardiendo, hemos llegado a pensar que les pagaron para boicotearnos.

¿Cómo os sentís después de esto?

Imagínate... Nos dio mucha pena; sobre todo por la gente, porque iban a ser tres conciertos muy buenos, dos en Santiago y uno en Concepción, y para la primera fecha estaban las entradas agotadas. Ahora mismo no tenemos pensado volver, porque la gente cuando nos ve en cartel desconfía y no compra entradas. Ojalá la situación se revierta y podamos volver pronto.

¿Nunca os han prohibido tocar en ningún sitio por vuestras letras?

En Lumbreiras nos quería vetar la derecha, a nosotros y a Lendakaris , pero al final tocamos; con mucha policía alrededor, eso sí.

¿Cuando un grupo nace y se encasilla desde el principio como lo hacéis vosotros, no piensa en que puede ser rechazado?

La verdad es que nunca nos lo hemos planteado. Nacimos con la idea de decir lo que pensamos, sin pensar en lo que iban a decir. Además el rock en mayor o menor parte se entiende de esa manera. Si algún día tenemos que mirar lo que decimos seguramente nos dedicaremos a otra cosa.

“Si algún día tenemos que mirar lo que decimos seguramente nos dedicaremos a otra cosa”

¿Cómo veis la libertad de expresión actualmente en España?

Digamos que es “estricta”.Meten en la cárcel a cantantes, a titiriteros,.. mientras que los corruptos que son los que tienen que entrar no lo hacen, o lo hacen bajo privilegio. Si eres fascista tienes libertad de expresión, si eres contrario no.

Es verdad que las cosas se pueden decir de muchas maneras; no siempre hay que utilizar la más directa, hay gente que no lo hace, y es totalmente respetable.

Lo principal es dejar elegir a cada uno qué decir y cómo decirlo , y esa libertad ahora mismo en España no existe.

La clave está en lo que comentáis; no es lo que dices, sino cómo lo dices. El Código Penal recoge como delito de odio aquella agresión física o verbal que atenta directamente contra el honor de otra persona. En otras palabras, es tan legal que un rapero vaya a la cárcel por crítica de forma directa a la monarquía como cantar el Cara al Sol.

La Ley en este país se antepone al sentido común.

¿Creéis mínimamente en la justicia?

¿Quién cree en una justicia que culpa a la víctima de una violación?

“¿Quién cree en una justicia que culpa a la víctima deuna violación?”

¿Hay presos políticos en España?

Sí. Es verdad que el caso más mediático ha sido el de los líderes del procés, pero hay muchas otras personas que actualmente están encarceladas por participar en movimientos sociales. Alfon, sin ir más lejos, es un preso político, y como él otros tantos.

¿Pensáís que a la derecha según qué, o según quién, le interesa recordar el pasado?

Por supuesto. ETA dejó las armas hace ocho años, y aún así, no solamente siguen utilizándola en sus discursos, sino que llaman terrorista a cualquiera. La sentencia de los jóvenes de Alsasua es por terrorismo, por ejemplo.

Sin embargo, si les preguntas sobre Franco o sobre las cunetas miran para otro lado.

¿ Ha perdido fuerza la independencia vasca en los últimos años? La mayoría de la gente que era independentista sigue siéndolo, aunque sí es verdad que ahora no se ve el mismo movimiento social que hace veinte años; los políticos, el PNV en este caso, se encuentra en una posición muy cómoda y no alimentan el independentismo como sí lo hacían otros gobiernos.

Antes daba la sensación de que Euskal Herria estaba un paso por delante de los demás territorios que querían la autodeterminación, ahora es Cataluña quien ha tomado las riendas.

¿Por qué? ¿Quizás la opinión mediática sobre Cataluña ha calado hondo en el País Vasco?

Eso seguro. Pero además se trata de un tema político, y sobre todo social, en el que el pueblo se ha organizado muy bien.

¿Vosotros votaríais ,si hubiera un referéndum mañana, salir de España?

Sí. Yo (Josetxu) me siento más vasco que español, pero independientemente de esto no votaría salir de España como país, votaría escapar de la gente que nos gobierna, y esto es algo en lo que creo, coincidimos la inmensa mayoría de la población.

¿Cómo argumentáis que la independencia no es sino otro tipo de nacionalismo¿ No traería consigo más fronteras?

Se puede llevar a cabo una independencia sin fronteras. No hay que entenderla como un aislamiento del resto del mundo, o de España en este caso; habrá quienes sí que tengan ese sentimiento tan identitario del que hablas, pero la mayoría es internacionalista y no quiere otra cosa que auto gestionarse; y por encima de esa mayoría se encuentra otra mayoría que lo único que quiere es votar; “a favor” o “en contra”. Es incomprensible que los mismos que hablan de democracia prohíban el acto más democrático.

“Es incomprensible que los mismos que hablan de democracia prohíban el acto más democrático”

Vox en España; la Agrupación Nacional, de Le Pen, en Francia; la Liga Norte, en Italia, la Alternativa para Alemania, el partido republicano de Trump, en Estados Unidos, el Partido Social liberal de Bolsonaro, en Brasil... Son algunos ejemplos de los partidos de ultra derecha que existen hoy en el mundo; algunos de ellos, como sabréis, están gobernando. ¿Hay que tener miedo?

Es un problema, desde luego. No sabemos si hay que tener miedo, pero sí mucho cuidado.

Es una especia de vuelta al pasado, donde, a través de discursos superfluos en contra de mujeres, inmigrantes, homosexuales, etc, se aprovechaban de la desesperación para ganar votos. Lo peor es que actualmente estos partidos se están llevando a la gente al bolsillo sin adornar sus discursos. ¡Tenemos que despertar!

Llegados a este punto: ¿Hay motivos para gritar otra vez?

Cada vez más.

¿Cuando dejaréis de hacerlo?

Cuando estemos en la tumba.

Noviembre de 2018. Un entrevista de Rubén Rozas

Web Oficial de Josetxu Piperrak