Manerasdevivir.com - Noticias del rock

25 de abril de 2024 | Publica tus noticias El Rock and Roll es la Única Fe Verdadera Arrodillaos Perros Infieles


Vídeos Recomendados
Marea
Nuestra fosa
Marea
Buena Muerte
Kaotiko
Plan B
Kike Babas y la Desbandá
Darse a la María
Parabellum
Demonios en el jardín
El Cuarto Verde
Salud
Uoho
¿Cómo has perdido tú?
Kaos Urbano
Tú no eres de los nuestros

Redes Sociales
Facebook
Twitter
YouTube

Enlaces a mano
Foto de Boni en HD libre de derechos
10 discos de vinilo para regalar o para tu colección
Gira de Despedida de Extremoduro
Clasificados para músicos
Rap Kinki y Trap
Reportaje
Los Suaves
Especial
Extremoduro
Especial
20 años desde su último concierto
Los festivales y la COVID-19
La fuerza mayor

Grupos
Uno al azar:
Harry Kane

Publicidad Mdv
Promoción efectiva en Internet. Consúltanos

Histórico
Citas y cosas

Colabora
Quieres escribir algo? Alguna noticia?
Somos más de 250.000 usuarios únicos mensuales

Lülu. En la mitad del camino

31 de enero de 2017. Por Javi Agradecido

Tenía ganas de hablar con Lülu, el Lulu Forraje de toda la vida, un tipo de ideas claras que una vez dada por finalizada la carrera de la banda, continúa con lo que viene haciendo desde hace años: canciones. Hablamos de “A medio camino” (su reciente primer EP en solitario), de cómo fueron aquellos años en que Forraje rozaron alcanzar sueño de vivir de el rock and roll (y que él a la manera de un obrero del rock and roll está consiguiendo), de su traslado a Madrid y del concierto que dará este viernes en el Hebe de Vallecas. Salir a tocar aún “le pone burro”.

Lülu

Lülu, con diéresis para evitar equívocos ¿En serio había gente que te llamaba o te llama Lulú? En Spotify se te atribuyen una serie de discos de lo más curiosos…

Sí, tron. Aunque no llevaba tilde, la gente que no me conocía tenía tendencia a decir “Lulú”. En algunos medios de comunicación no especializados, a saco. Pero la diéresis, aparte de para marcar la fuerza de voz en la primera “u”, es un poco por estética y por dar un valor añadido al logo. Creo que queda guay y está muy bien para diferenciarme de otros y otras “Lulu” que hay por el mundo. Aunque como bien dices, en Spotify no me han dejado poner la diéresis y si buscas “Lülu” salen un montón de discos de otra peña (risas). Hay que buscar “Lülu a medio camino” para que salga mi EP.

Se nota que “A medio camino” es un disco tuyo, se te reconoce en las composiciones, pero ese toque más tranquilo que en general le has dado ¿Es premeditado o así son las canciones que te salen ahora?

Bueno, he querido hacer un disco “a medio camino” entre el rock y la canción de autor. Hay un par de temas bastante roquerillos, como son “Al anochecer” y “Sueños lúcidos” que pueden recordar un poco más a mi etapa en Forraje. Es inevitable. Pero luego en uno he metido metales, que es algo que nunca habíamos hecho en Forraje y en el otro le he dado muchísimo protagonismo al Hammond. He intentado que, dentro de lo posible, se notase la diferencia entre lo que hago ahora y lo de antes. Las otras tres son más tranquilitas. Pero vamos, que en Forraje también había mucha balada. La idea es quedarme ahí, “a medio camino” entre el rock y la canción de autor. Que haya sitio para temas roqueros pero también para baladas si me apetece.

Los arreglos de piano o cuerda ¿Estaban en tu cabeza cuando nacía la canción o vinieron después?

En mi cabeza estaba que hubiese pianos, cuerdas, metales… pero no sabía qué arreglos exactamente. Por eso conté para la producción y arreglos con Carlos Manzanares, que es un titán y se ocupó de todo eso. De hecho, además de los arreglos y la producción, ha metido el saxo, los teclados y los coros. Trabajar con él es muy fácil y divertido. Lo recomiendo encarecidamente.

Recuerdo que en 2012 o 2013 comenzaste a girar en acústico, primero con el dúo “Perversión Española” con Randy de Desalojo y luego tú sólo anduviste una buena temporada de arriba pa’bajo. ¿Esta etapa se refleja de alguna manera en “A medio camino”?

Supongo que ahí empecé a sentirme un poco cantautor. Temas como “Dentro de tu cama” o “Piel con piel” son temas con mucha influencia de la canción de autor y si haces mucho acústico, a veces a la hora de componer piensas un poco en cómo va a sonar eso cuando estés tú solo en un escenario. Cuando compones para que suene con toda la banda piensas de otra manera, aunque compongas con la acústica. Hay tres temas en el disco que los hice pensando en que tenían que sonar bien de las dos formas.

¿Cómo salían esos bolos? ¿Te llamaban de los garitos? ¿Te los buscabas tú solo?

De algunos sitios me llamaban, pero por lo general me los buscaba yo. Me pasaba la semana rastreando garitos de conciertos en Internet y les llamaba o escribía. Si les entraba a cien, salían quince o veinte. De esta forma, conseguí dar entre cuatro y ocho acústicos al mes y vivir de ello. Esto sigo haciéndolo. Aunque hago también conciertos con la banda, hago mucho acústico.

Creo que has podido vivir de esos conciertos, demostrando que si uno mueve el culo puede “vivir de la música” (ese totem) ¿Cómo fue o cómo está siendo —porque sigues haciéndolo— esa etapa de supervivencia? ¿Te planteaste en algún momento colgar la guitarra y buscar un curro “normal”?

Sí, al final, en invierno, los acústicos son lo que me da de comer. Llevo algo más de tres años viviendo de la música gracias a dar unos cuarenta o cincuenta acústicos al año. Con banda, en invierno, hago uno o como mucho dos al mes y el resto son todo acústicos. Ya en verano, todo lo que salga con banda pues cojonudo. Colgar la guitarra… no. Si acaso, si en algún momento la cosa me fuese mal y no pudiese seguir viviendo de lo que me gusta, bajaría el ritmo de conciertos, pero creo que la guitarra no la voy a colgar nunca hasta que me falle la patata o algo.

Recordemos la época dorada de Forraje, cuando girasteis con Marea, el fichaje por Warner… ¿Cómo fue aquel periodo? ¿Se sentía vértigo? ¿Qué cosas aprendiste de aquellos años? ¿Te decepcionó algo?

Sobre todo los primeros años los recuerdo con mucha ilusión. Nuestro primer contrato discográfico en 2003, nuestra primera vez con disco en Madrid, nuestro primer Viña Rock en 2004… Todos seguíamos currando en otras cosas, pero lo hacíamos todo con una ilusión que durante el fin de semana te olvidabas de que el lunes tenías que volver al tajo. Luego el domingo, a la vuelta, en la furgo, es cuando venía el bajón. Soñábamos con cómo sería volver de un concierto en la furgo sabiendo que el lunes no tienes que ir a currar en otra cosa, que nuestro único trabajo fuese ensayar y tocar. Al final, los demás siguen con sus curros, pero yo lo he conseguido. Vértigo no sentíamos porque fue todo poco a poco, no fue algo que viniese de golpe. Sentíamos ilusión por todo lo que íbamos logrando, pero vértigo no. Aprendimos muchas cosas. Todo lo que sé sobre este mundillo lo aprendí a lo largo de todos estos años. Decepciones, muchas, pero más alegrías que otra cosa. Quizás, la única gran decepción es que Forraje se tuviese que acabar separando. Me encantaría poder compartir con ellos esta sensación que tengo de estar en el mejor momento de mi vida, pero nos hemos quedado a un paso de poder vivir de la música como grupo. Una pena.

¿Cuándo decides irte a vivir a Madrid?

Con Forraje “en vida”, habíamos hablado muchas veces de que si viviésemos en Madrid, otro gallo cantaría. Que a la hora de ir a tocar, había una gran diferencia entre estar en el centro de España y estar en una esquina como nosotros, que cada vez que íbamos a tocar a Murcia, Albacete o Barcelona, teníamos doce horas de furgoneta. ¡Doce putas horas! Pero nunca nos llegamos a plantear en serio lo de venirnos a vivir a Madrid porque todos teníamos curros que no podíamos dejar. Cuando Forraje decidimos separarnos, yo ya llevaba un año y pico viviendo de dar acústicos y vi clarísimo que mi carrera en solitario debería empezarla desde Madrid. Además, mi novia, que llevaba en ese momento un par de años viviendo conmigo en Galicia, es de Fuenlabrada. Así que en septiembre de 2015 dimos el último concierto de la historia de Forraje y en noviembre ya estaba yo viviendo en Vallecas y ensayando con músicos de Madrid. Me encanta Madrid, aunque una vez al mes me subo a Galicia, a dar un par de acústicos por allí y estar un poco con los míos. “A terriña” tira.

Tú que llevas en esto unos cuántos años ¿Cómo ves la escena? ¿Mejor o peor que hace 15 años? ¿Qué echas en falta o que te sobra a día de hoy?

Veo que bandas hay a saco, para mi gusto tantas que es imposible prestar atención a todas. Esto hace que a veces no escuches cosas que valen la pena porque está el mercado saturado de bandas de dudosa calidad. Para mí, ese es el lado malo de Internet. No hay tiempo para escucharlo todo y decidir con qué te quedas. Todavía hay miles de personas del rock que no conocen a Forraje a día de hoy y que estoy seguro de que les habría encantado. Pero claro, es complicado. Todo el mundo tiene derecho a mostrar lo que hace.

¿Qué discos has escuchado en los últimos 7 días?

En los últimos siete días… “Destrozares” de Robe; “La vida aparte” de Paco Cifuentes; “Live! Live! Live!” de Bryan Adams; “Canciones de segundo origen” de Exceso; “Gratis hits” de El niño de la hipoteca… un poco de todo.

¿Cómo va tu faceta de escritor? Participaste en el libro “Antología por el relato” (2010) y poco más he podido encontrar ¿Hay más cosas tuyas editadas? ¿Algo en mente?

Tengo varios relatos cortos guardados en mi ordenador que espero poder editar algún día, pero todavía no. Ahora estoy centrado en otras cosas: todo el tema del disco nuevo, buscar bolos, tocar y todo eso. Hubo un tiempo en que escribía artículos y relatos para una revista de la comarca del Barbanza que se distribuía por los bares. Ahora de vez en cuando escribo relatos, pero se los enseño a la gente cercana o como mucho se los envío a Kutxi o a David González para que me digan qué les parece. Si ellos me dan el aprobado los paso a la carpeta “Relatos para el libro” (risas). No sé. Cuando escriba cinco o seis más, posiblemente me líe la manta a la cabeza y saque un libro.

Para finalizar. Este viernes estás con la banda en el Hebe ¿Ya sientes el gusanillo al pensar en el concierto?

Sí, tío. Tocar con banda en Madrid me sigue poniendo burro. Además este viernes se estrena un nuevo componente de la banda, Pablo, al saxo y teclados. Vamos a tocar los temas del nuevo EP y dar un repaso a las canciones más populares de Forraje y se viene Benny, el poeta, con Angel de Carroña a la guitarra a recitar unos poemas de su nuevo libro para abrir el concierto. Va a ser una fiesta. Recomiendo a todo el mundo que se venga. Todavía quedan entradas anticipadas en Entradium.

Lülu en directo

Por Javi Agradecido
Fotos: Lülu

Buscador
Publicidad
Publicidad - El Cuarto Verde
Publicidad - D'Ordago
Publicidad - Zalez - Nuevo disco
Publicidad - Radiocrimen