Doble Esfera. “El concepto es la lucha por levantar el rock y el metal”

14 de diciembre de 2016. Por Kike Babas y Kike Turrón

Rock Duro del Siglo XXI es la nueva referencia de este cuarteto murciano ejecutor de un rock duro contemporáneo que sin piedad abarca del hard-punk a lo metálico, y que desprende toneladas de tórrida y metalúrgica electricidad. En este trabajo la banda autoreflexiona sobre la propia situación del rock duro en nuestro país y lo que significa estar en un grupo con tantos elementos a la contra (el panorama musical actual) y el tesón y las ganas por bandera. El guitarrista del grupo, Antonio Elzaurdia, nos detalla.

Rock Duro del Siglo XXI se llama vuestro nuevo lanzamiento. ¿El título os define?

Pues sería una buena forma, sí. Rock duro, pero moderno y actualizado. Al estar entre medias de bastantes tipos de rock y metal siempre se nos ha etiquetado de diversas formas. Rock Duro del S. XXI es una buena manera de describir nuestra música.

El EP lleva una temática conceptual que gira alrededor de la situación del rock duro en la actualidad, explicadnos un poco el concepto.

El concepto es la lucha por levantar el rock y el metal, que en España está bajo mínimos. Nunca ha estado tan desaparecido de los circuitos comerciales y cada vez está más restringido a circuitos demasiado underground. La industria pasa totalmente de los grupos de rock emergentes y solo apuesta dentro del rock por los grandes dinosaurios. Creemos que ya es hora de revertir esta situación. En el disco hablamos sobre todo esto y otros temas relacionados: las dificultades de la carretera, el proceso compositivo, la renovación que necesita el estilo… También lo relacionamos con la situación social actual.

¿Por qué un EP y no un LP? ¿Cómo ha sido el proceso de composición y grabación?

Básicamente es por motivos económicos. Grabar en buenos estudios es caro y preferimos tener algo para promoción también. El proceso de composición ha sido como de costumbre, lo asumimos Eladio Ruipérez (vocalista) y yo (Antonio Elzaurdia, guitarra), llevamos los temas al local bastante claros a nivel melódico y estructural, y ya en el local entre los cuatro los arreglamos y les damos la forma definitiva. Willy Medina y Pedro Martínez aportan detalles y arreglos para que las canciones crezcan. La grabación esta vez se ha repartido entre el estudio de Pedro en Mula y La Sala de Máquinas de Lorca con Manuel Torroglosa. La mezcla y masterización se han hecho en La Sala de Máquinas.

Habéis acabado la primera parte de la gira de presentación ¿Qué tal se ha dado? ¿Qué esperáis para las fechas de este 2017?

Se ha dado bastante bien, con las dificultades propias de cualquier grupo de rock emergente, pero con buenos resultados en el global. Ahora hemos hecho un parón, que ya lo teníamos planificado, por motivos personales y a partir de febrero tenemos bastantes fechas: Alzira, Albacete, Murcia, Ciudad Real, Granada… y estamos trabajando en varias que anunciaremos en breve.

El anterior EP, El baile de los necios (2015), fue un trabajo comentado en el circuito especializado…

El baile de los necios supuso el asentamiento de nuestro estilo y el reconocimiento de la crítica especializada. Digamos que nos situó en la parrilla de salida del underground nacional y amplió nuestro núcleo de seguidores fuera de la Región de Murcia. La verdad es que nos encanta escucharlo… Y eso quiere decir que estamos contentos con lo que hicimos. Tenía todavía algunos defectos que hemos limado con la nueva entrega.

Vuestra carrera comenzó con el LP Mi universo (2012).

Con el primero las sensaciones son contrapuestas. Por un lado lo recordamos con cariño por la ilusión que nos supuso hacerlo y editarlo y además contiene himnos del grupo como “El Exterminador” o temazos como “Perdido en el tiempo”, pero es un disco un poco confuso, sin una idea clara de por dónde tenía que tirar la música de Doble Esfera. Además había canciones que estaban compuestas por Eladio y por mí hacía 15 años, canciones nuevas… Aún así para muchos de nuestros seguidores es el disco preferido, debido a la experimentación que hay en él y la frescura que desprende, todo hecho sin mucha premeditación. Lo comparo con otros discos de grupos que les pasa algo parecido, como el Jesús de Chamberí de Mägo de Oz, el primero de Scorpions, el primero de Iron Maiden… discos que para sus creadores son extraños, pero para sus seguidores son joyas.

¿Cuáles son esos discos y grupos que no faltan nunca en la furgoneta de gira?

Escuchamos de todo, la verdad: en los dos últimos viajes hemos puesto Uzzhuaïa, Mysterika, Los Coronas, Los Straitjackets, Michel Camilo, Jammin Dose… mientras contesto estas preguntas estoy escuchando lo nuevo de Su Ta Gar, un disco muy tranquilo, pero con mucha clase y emotividad.

Por Kike Babas y Kike turrón