Fin de la gira "Por la boca vive el pez" de Fito&Fitipladis
Con apenas 1,65 de estatura, Adolfo Cabrales se ha convertido en un gigante difícil de superar. La genética canalla de la ría, su calidad musical, y el momento profesional que atraviesa, contrastan con su humildad. La misma que el sábado en Madrid le impedía mantener la mirada fija en un punto después de dos horas de concierto. Por miedo a llorar; ante él, más de 15.000 personas coreaban su nombre. Lo dijo Calamaro hace unos meses: A Fito la gente no sólo lo quiere escuchar. Lo quiere a secas.
En buena parte, Fito salió el sábado al escenario del Palacio de Deportes de Madrid obligado. Por una legión de seguidores –cerca de 700.000 han acudido este año a sus conciertos- que habían agotado las entradas de su concierto de fin de gira, previsto para ayer domingo. Así que hubo otra fecha, y volvió a colgar el cartel de No hay entradas: más de 30.000 personas en sólo dos días. Aunque poco le deben importar las cifras mareantes a una persona que, en un año, cuenta sus conciertos por centenas y sus discos vendidos por centenares de miles.
Pero Fito no sería lo mismo sin los Fitipaldis que le han acompañado en esta última gira. En Madrid, despejaron cualquier dura. Músicos solventes que hacen gala de una envidiable actitud. Carlos Raya, sublime a la guitarra; Candy Caramelo al bajo; Niño Bruno, batería; Javier Alzola, saxo y percusión y Joserra Senperena en el Hammond. Capaces de darle al blues, al rhythm&blues. Y la satisfacción de saber que disfrutan tocando rock and roll.
Fito quiso además que le acompañara en este último periplo por otro de los grandes escritores de canciones que tiene el rock en castellano. Quique González abrió el camino, quizás con un repertorio demasiado pausado, a Fito, con el que luego se cantó Cerca de las vías, una canción que bien podía haber sido escrita por él.
Cumplidas las dos horas de de concierto, Fito se fue lanzando un guiño a todo el mundo. La canción que puso punto y final al año más exitosos de su carrera fue Acabo de llegar. Como si quisiera dejar claro que seguirá por muchos años siendo el pequeño héroe de las canciones sencillas.
Enviado por Chivo el 31.12.07