GENIALIDAD Y EXCESO.
Pavellò olimpic vall d´hebron,una larga cola esperando que habran las puertas para poder disfrutar de la nueva visita de DREAM THEATER por estas tierras,cada vez que vienen atraen a mas publico,parece ser que la popularidad de la banda va creciendo por momentos,puede ser que tras la anteriror gira de dos dias en zeleste,el ultimo de ellos con sorpresa incluida(tocaron el masters of puppets de metallica enterito) haya tenido algo que ver.
Esta vez tambien se anunciaba una noche especial,pero no hubo ninguna sorpresa,lo especial era que el concierto duraria 3 horas,con un descanso de 15 minutos.
El pabellon repleto,4 o 5 mil personas,escenario simple y sobrio,ningun tipo de decorado,tan solo 3 pantalas de video en la parte trasera,una central mas grande y dos laterales un poco mas reducidas,9 de la noche,se apagan las luces y empieza la actuacion.
En las pantallas se empieza a visualizar una especie de video recordatorio de todas sus etapas,intercalandose imágenes del grupo con las portadas de sus albums y las fechas de edicion,esto dura unos 5 minutos y acto seguido van apareciendo los musicos sobre el escenario,AS I AM primer tema de su ultimo disco empieza la descarga,el sonido es muy bueno aunque el lugar tampoco es el idoneo para este tipo de acontecimientos,se pegan una hora y media tocando temas de todos sus tiempos mientras por las pantallas , puedes ver el disco al que pertenecen,imágenes de primeros planos de los musicos en los momentos mas algidos,el publico esta embobado(como siempre),sobretodo si es la primera vez que los ves,es algo que impresiona.De esta primera parte destacaria el momento en que estaban tocando un fragmento de su aclamado METROPOLIS,beyond this life creo que era el tema,donde en mitad de la cancion empiezan un duelo particular de guitarra y teclado realmente espectacular,de repente aparece FRANK ZAPPA en las pantallas,por lo que deduzco que la melodia que estan interpretando estos cuatro monstruos es de el,pero vaya yo no la conocia,y para acabar esta larga improvisacion?se pegan otro pequeño duelo instrumentistico,esta vez entre el teclado y el bateria,fueron unos 20 minutos sublimes.
Tras tocar hora y media sin parar desaparecen del escenario y se toman un descanso de 15 minutos,pasados estos vuelven y se marcan otra hora y media de concierto,de esta parte destacaria el momento de streets of conciousness,tema instrumental de su ultimo disco.
En fin ,un gran concierto,que fue respondido al final por todo el publico asistente con una gran ovacion,el pabellon en pie aplaudiendo a unos genios locos durante varios minutos .
SALUD&ROCK@NROLL
DREAM THEATER 10-2-2004
bueno,esta cronica es mas profesional,aunque se ve que el periodista no disfruto mucho...y encima entro gratis el capullo. 
? Más de tres horas de delirio instrumental con desmedida tendencia al exhibicionismo
NANDO CRUZ
ARTISTA Dream Theater
LOCAL Palau Olímpic de la Vall d'Hebron
FECHA 10 de febrero
Para Dream Theater el rock progresivo es un deporte olímpico, una disciplina de alta competición donde el pentagrama es la pista de atletismo. En Train of thoughts, los neoyorquinos han aparcado (relativamente) su condición de compositores maratonianos y han apostado por la velocidad. El resultado es un disco más heavy que de costumbre, pero igual de largo y retorcido.
El martes, ante un público que casi llena el local, inyectaron su habitual sobredosis de heavy progresivo con puntas de velocidad endiablada y recesos melódicos. Todos los vicios, virtudes, excesos y limitaciones del género elevados a la enésima potencia. Pese a ser uno de los grupos más populares y accesibles del género, su concepción de la música les impide decir basta. Se enfrascan en la espiral de digitaciones malabarísticas, cambios de ritmo y exhibiciones vocales y ya no hay quien les pare. Nadie sabe cuándo puede acabar la canción.
Más allá de la afición que uno tenga por la música progresiva hay un hecho: más notas no hacen mejor música. Incluso dentro del rock sinfónico hay grupos que lo han demostrado. Pero John Petrucci emborracha las composiciones con punteos de guitarra --los de In the name of God rozaron el absurdo-- y así las canciones no respiran, no comunican. Da la sensación de que los músicos piensan más en sí mismos que en la música que tocan, de modo que lo que emerge es una abrumadora masa de notas que, pese a los alardes técnicos, acaba imponiéndose a base de fuerza e insistencia, no de sutileza. Y eso, en una banda de estas características, es una tremenda derrota.
Párrafo aparte merece el montaje. Como su actual gira recala en grandes pabellones, el grupo prometía un show acorde con las nuevas dimensiones de los recintos, pero lo que presentaron fue un espectáculo pobre, limitado a la combinación de efectos visuales de la época de Valerio Lazarov, panorámicas de acantilados y mareas, portadas de los discos de los que procedían las canciones y planos de los músicos en acción que, por su bajísima definición, parecían tomados desde una webcam de 12 euros.
SI,SI,TODO LO RIDICULO QUE USTED QUIERA SEÑOR PERIODISTA,PERO ESO NO DEJA DE SER SU PUNTO DE VISTA,HAY MAS DE 4000 PERSONAS QUE LO DISFRUTARON...
WEB CAM DE 12 EUROS?BAJISIMA DEFINICION?PERO QUE TONTERIAS DICES...
SALUD&ROCK@NROLL
? Más de tres horas de delirio instrumental con desmedida tendencia al exhibicionismo
NANDO CRUZ
ARTISTA Dream Theater
LOCAL Palau Olímpic de la Vall d'Hebron
FECHA 10 de febrero
Para Dream Theater el rock progresivo es un deporte olímpico, una disciplina de alta competición donde el pentagrama es la pista de atletismo. En Train of thoughts, los neoyorquinos han aparcado (relativamente) su condición de compositores maratonianos y han apostado por la velocidad. El resultado es un disco más heavy que de costumbre, pero igual de largo y retorcido.
El martes, ante un público que casi llena el local, inyectaron su habitual sobredosis de heavy progresivo con puntas de velocidad endiablada y recesos melódicos. Todos los vicios, virtudes, excesos y limitaciones del género elevados a la enésima potencia. Pese a ser uno de los grupos más populares y accesibles del género, su concepción de la música les impide decir basta. Se enfrascan en la espiral de digitaciones malabarísticas, cambios de ritmo y exhibiciones vocales y ya no hay quien les pare. Nadie sabe cuándo puede acabar la canción.
Más allá de la afición que uno tenga por la música progresiva hay un hecho: más notas no hacen mejor música. Incluso dentro del rock sinfónico hay grupos que lo han demostrado. Pero John Petrucci emborracha las composiciones con punteos de guitarra --los de In the name of God rozaron el absurdo-- y así las canciones no respiran, no comunican. Da la sensación de que los músicos piensan más en sí mismos que en la música que tocan, de modo que lo que emerge es una abrumadora masa de notas que, pese a los alardes técnicos, acaba imponiéndose a base de fuerza e insistencia, no de sutileza. Y eso, en una banda de estas características, es una tremenda derrota.
Párrafo aparte merece el montaje. Como su actual gira recala en grandes pabellones, el grupo prometía un show acorde con las nuevas dimensiones de los recintos, pero lo que presentaron fue un espectáculo pobre, limitado a la combinación de efectos visuales de la época de Valerio Lazarov, panorámicas de acantilados y mareas, portadas de los discos de los que procedían las canciones y planos de los músicos en acción que, por su bajísima definición, parecían tomados desde una webcam de 12 euros.
SI,SI,TODO LO RIDICULO QUE USTED QUIERA SEÑOR PERIODISTA,PERO ESO NO DEJA DE SER SU PUNTO DE VISTA,HAY MAS DE 4000 PERSONAS QUE LO DISFRUTARON...
WEB CAM DE 12 EUROS?BAJISIMA DEFINICION?PERO QUE TONTERIAS DICES...
SALUD&ROCK@NROLL
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