Los Suaves al Leyendas del Rock
«Que se cierren las fronteras en el paÃs del rock and roll, para guardar nuestra pena ¿Sabes? Los Suaves dicen adiós. Silencio, silencio en la arena...» Este es el epitafio que nadie querrÃa escribir; la despedida que nunca deberÃa de llegar. Pero se torna inexorable y La Santa Compaña se muestra insobornable. A ver ahora cómo condensamos tanta historia vivida junto a la efigie del gato, Gato Negro de la Noche. Canciones, emociones, conciertos, sentimientos, amistades compartidas. No resulta tarea sencilla, pardiez. «Que pena me da ¡que pena! cuando te veo marchar, que solo y triste me dejas cuando la noche se va, dime por que no te quedas esta vez un poco más, es que quieres que me muera o es que me quieres matar». La eterna lluvia gallega, las montañas de Ourensa, la melancolÃa y la nostalgia, la soledad espesa como bruma negra, el San Francisco Express que nos lleva, Isaac, sus veinte años sólo veinte y su pena eterna.«El dÃa en que se acaben los recuerdos, cuando la muerte me encuentre por fin. El dÃa en que llega el gran desengaño, cuando la vida se burla de tÃ. El dÃa en que sepa que no soy nada y nada hay para mÃ. Ese dÃa piensa en mÃ. Descansaré en paz, amigo. Calla, no llores por mÃ. He escogido mi camino». Ahora, abocado a la fatalidad, la lejana letanÃa te recuerda que Dios es Suave, pero ya ni eso basta para consolarte, carallo. Y aunque nadie sabemos cómo pasa su vida, sà tenemos claro nuestra futura orfandad de profundos sentimientos. Y ya paro, que las lágrimas me ahogan. «Noche que te vas...dame la mano...noche que te vas». leyendasdelrockfestival.com.
Enviado por Sufriendo & Gozando el 19.01.15