unos versos.
Y ahora mismo lo hago,
estos versos que escribo,
son para una mujercilla,
que puede ser mi madre.
Para una mujercilla,
que me cayó bien cuando hablé
por primera vez con ella.
Si es que,
madre así daría gusto de tener,
pero que le vamos hacer.
Como me dijo ella,
lo bueno abunda,
digo esto, por que se llama como mi madre,
Pilar.
Digo esto,
por que gente así,
da gusto conocer cuando menos te lo esperas.
Como fue con la niña de mis cuentos,
toda una sorpresa.
Que te puedo decir,
que no soy un golfo,
como quieres llamarme.
Esto me lo dijeron una vez,
y mirame, sigo igual de bribón.
Bueno,
como te dije,
te escribiría unos versos,
no cuantos.
Este poema,
te lo dedico a ti.
Pili.
El guasón de diecinueve años
