Comenzar nunca es fácil, saber llevar el ritmo correcto es algo a lo que parece que no me acostumbro; o demasiado rápido o demasiado lento, haga lo que haga siempre termino cansado antes de tiempo.
Me gustaría pensar que, quizás, sean los demás los que nunca se acostumbran a mi ritmo, aunque me parece más probable la posibilidad de que no me conozca a mi mismo tan bien como me gustaría. Muchas veces pienso que quizás me subestimo; otras ?la mayoría-, que me sobrestimo.
- Joder qué frío que hace. ¿Cómo nos repatimos las cosas?
- Una cuerda para cada uno. Yo llevo los fisus y los tornillos, pilla tú los friends. El resto ya lo llevo en la mochila.
A veces, sobre todo en las cuestas arriba y en los momentos delicados, surgen dudas. Cerrar los ojos y superarlas nos muestra que la vida es una actividad puramente psicológica y que nuestro peor enemigo somos nosotros mismos. Somos nosotros los fabricamos nuestra propia imagen; somos nosotros los que tejemos nuestras profecías autocumplidas y formulamos excusas que jamás creeríamos en otro. No somos capaces de ver que los espejos sólo reflejan los miedos.
- ? te quedan unos 10 metros.
- Joder, aquí no hay ni una mísera fisura y el tornillo no aguanta ni de coña. Tenía que haber ido más despacio. No mires abajo y controla el miedo, la salida ya está cerca.
Seguir sendas marcadas siempre ha sido el camino más fácil; sin embargo, aunque salirse del camino y abrir huella parece más atractivo de primeras, son pocos los que lo hacen si no es por obligación. Andar por tus propios medios tiene sus peligros, pero deja siempre un buen sabor de boca. También suele dejar un buen dolor de piernas y, a veces, deparar algún susto. Es el precio de la libertad.
Eso sí, no todos estamos dispuestos a pagarlo; la cobardía, como la valentía, también es un rasgo humano.
- ¿Y por dónde coño es ahora?, este asco de nevada ha borrado hasta nuestra huella de vuelta. Puto G.P.S., estos cacharros te dejan tirado cuando más los necesitas.
- ¿Dónde estamos?, todos los putos árboles me parecen iguales.
- Saca el mapa y la brújula, lo vamos a hacer a la vieja usanza. Como debe ser.
Todo puede cambiar en un segundo; pasar de una posición estable a la caída libre puede ser cuestión de un abrir y cerrar de ojos. Entre medias, siempre fugaz, surge la sorpresa, la pregunta, la exclamación.
¡Joder!
Las dudas pueden ser un detonante; una simple falta de atención otro factor muy importante; la sobreconfianza y el desprecio del riesgo son demasiado comúnes. El desconocimiento y la ignorancia de éste suelen ser la explicación más usual.
- ¿Qué coño haces subiendo por ahí en zapatillas? Tirad para abajo, que os váis a matar. Tal como está la nieve, como os caigáis no os para ni Dios. Y no sé si te habrás dado cuenta, pero hay 300 metros hasta la Hoya del Crampón.
- A mi me da igual, puedo bajar corriendo, aquí no pasa nada?
- Pues haz el favor de bajar corriendo lejos de mi.
Hacerse preguntas suele ser humano. Buscar los porqués de las cosas, su sentido, es inherente a nuestra naturaleza.
Nunca hacemos nada por ninguna razón, todo tiene su porqué.
- ¿No te has preguntado nunca por qué haces ésto?
- Sí, me libera de cualquier otro pensamiento; por mi cabeza sólo pasa dar el siguiente paso, no hay nada más importante en ese momento. El viento en la cara, el frío en el cuerpo, el cansancio. No sé, me siento bien así.
Volver a casa es siempre reconfortante y nunca se aprecia más que cuando has pasado un buen tiempo sobreviviendo con lo mínimo. Las pequeñas preocupaciones dejan de tener importancia y todo se valora más. Es un paso adelante, un recordatorio de lo engañados que estamos. Volver, eso es lo importante.
Y tener cosas que contar, también.
- Hola personas, ya hemos vuelto.
- Cuéntame?
Dicen que vivir es peligroso, y muchos se refugian en esa premisa para quedarse en casa. Yo sólo entiendo la vida como un regalo que hay que aprovechar. Cada uno lo puede hacer a su manera, pero el objetivo es el mismo: mirar atrás y ver que hemos aprendido algo, que hemos avanzado; lo importante es sentir con una sonrisa en la boca que ha merecido la pena.
Costumbres (II)
-
- Mensajes: 2041
- Registrado: Sab Mar 12, 2005 10:08 pm
- Ubicación: Another station, another mile...
- Contactar:
¿Quién está conectado?
Usuarios navegando por este Foro: Amazon [Bot] y 3 invitados