Esta noche la luna es tan preciosa, y más quien la acompaña, esa morena que esta sentada en ella, esa morena que me vuelve loco, sólo con mirarme ya me tiene hipnotizado.
Saldré en su busqueda, no sé donde estoy, parece los años ochenta, donde punkis y jipis se llevaban fatal, y lo siguen haciendo, pero bueno, fuí por los madriles, esas callejuelas, con esas farolas medio encendidas, nonla encontraba, pregunraba por ella, preguntaba, y ella no aparecía, ella seguía desaparecida. Ni Luis la encontraba, y era mucho decir, de este pirata que navegó por mares y ríos desconocidos para muchos.
Cogí un bus, ya que un amigo me dijo que esa morena andaba por el duero, yo me quedé un poco pensativo, si ella estaba allí, dije que la aventura ya empezaba, dije que yo iba tras ella, dije que la encontraría y eso haría.
Llegue a una ciudad llena de burgaleses, llegué y fui calle por calle en la busqueda de esa morena, no dejaba de pensar en donde estaría, preguntaba por Luz de Luces, ya nadie me respondía, todo el mundo se reía. Yo triste caí en una acera, dejé mi vista caída al suelo, dejé mis versos, que fueran por el viento:
Fumando mi ultimo cigarro,
desespero en verte morena mía.
Acá tirado en el suelo,
vuelo en mis sueños,
para ver si puedp encontrarte.
Dejo mi mochila a mi lado,
mientras grises y picolos,
me piden la documentación.
Acá sigo esperando,
que me nombres,
para ver, para ver si estás en esta ciudad.
Estos versos corrían aire y agua, ella, Luz de Luces, los esuchó, hasta poder verlo sentado en una acera, con su pitillo. Ella, se acercó y le dijo que si quería un poco de cariño, el chico, le contestó que solo quería el de una mujer, el cual el iba buscando (no sabía que era ella). Ella le nombró, le dijo Ángel, quieres oirme, él, se quedó frío como el hielo, miró para arriba, y era ella con su sonrisa de maravillas.
Se levantó, y le dijo que la andaba buscando durante semanas, durante horas, ella, le dió un beso, él volvió a despertar de su sueño. Al despertar ella estaba a su lado, le dió un beso, ella despertó y le preguntó si pasaba algo, él con una sonrisa, le dijo que no, que siguiera durmiendo, que él estaba soñando con ella miles de cosas tan bonitas como ella.
Ella lo abrazó y siguió durmiendo, él, se durmió, y siguió con el cuento.
Va por ti luz de luces, va por ti pequeña.
¿Donde estás? 2ª Parte...
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