Carta desde mi celda

[El Poeta]

¡Sol déjame en paz!
La luna me ilumina, en esta ruina entra la
claridad.



No quedan sonetos en el cofre de mi musa. Se desperdigaron, las letras se deshicieron en resina pegajosa. Se desvanecieron para siempre. Sólo dios sabe su paradero...

Dejádme, no cometáis la barbaridad de preocuparos por semejante estúpido como yo. No merece la pena que malgastéis vuestro valioso tiempo, empleándolo en criticarme, aconsejarme, preguntarme, herirme u
odiarme. Y muchísimo menos en quererme (no digo amar,porque este verbo y sus conjugaciones, para mí, son falaces, irreales). Idos, fuera de mí, no me dirijáis la palabra, ni me instéis a traspasar el umbral
de vuestros corazones. Aseguraos por las noches de echar los candados
de las verjas, los cerrojos de las puertas y los postigos de las ventanas. Bajad las persianas y corred las cortinas. Dormid con una pistola cargada
en el primer cajón de vuestra cómoda. Permaneced alerta, en guardia, dispuestos a adescoyuntar mi espíritu, si lo véis aparecer. Dispuestos a borrar de vuestros pensamientos cualquier resquicio de mí. Olvidad mis pupilas azules cuando son envueltas por un velo rojizo, mis grasientos y largos cabellos azabache, mi delgado vientre y las cicatrices que la surcan
(dichosa varicela...), mi sonrisa (la prófuga y la sincera), mi voz de aprendiz de trovador frustrado. Todo. Hasta la más minúscula gota de sudor que adornaba mi frente unagosto cualquiera.

Vivid,carpe diem.Que no os quite el sueño esta epístola, más bien telegrama, inspirado por el fracaso y la angustia existencial. Cuando me suba al autobús, evitad mi mirada de hiena. Haced pasto de las llamas mis fotografías y escritos que alguna vez os dediqué, porque esto se ha acabado. La sangre fluye, cada vez más lentamente, por mis arterias, envenenadas de rabia y confusión. Mi garganta, irritada, parece reclamar
un buen tajo con mi Guillette Mach 3. Mis dedos amarillentos firman mi última voluntad, sosteniedo mi último cigarro. Acaba de concluir la versión
de Knockin's on heaven's door,cantada por Axel Rose. Llamando a las puertas del cielo... del purgatorio... o del infierno.

Adiós, gente de poca fe. Gracias por los buenos momentos compartidos, por las borracheras, las discusiones sobre política, las prácticas amatorias(en cursiva, reincido). No os quepa la menor duda de que, a pesar de los pesares, brindaré esta madrugada con vino peleón por vosotros, pqueños cabrones, sentado en el regazo de la luna. Que os vaya bonito, y que os desatendáis cuanto antes de este mierda que escribo, esta noche, tras las rejas de mi celda, de mi presidio individual, de la cárcel de mis palabras, mientras espero mi ejecución, a manos del tiempo.