Desorientados (dios pasó de largo)

[Riestra1926]

Ahí fuera están los verdes radiactivos,
los campos mutilados bajo una luz artificial,
la fiebre de basalto en el asfalto
y una alambrada para evitar nuevos atracos.
Ahí fuera están los campos llenos de cruces
como obstáculos esperando que caiga de bruces,
pero mis cálculos no engañan,
son las coordenadas de la diana.

Dios apunta, yo salgo corriendo,
Dios resulta ser novato
y yo me llevo otro premio.

Dejando de lado la suerte y la muerte
tapizo mi madriguera y me hago un búnker,
un último escondite de luces y sombras.
Desde el final del túnel
no sé si oirás las bombas
pero ayer murió la incertidumbre.

No quedan tratos que cerrar para salir intactos,
no quedan pactos que firmar, Dios pasó de largo.
Y sin embargo me quedan dos manos que agarrar.
Cuando pegue el último salto hacia el vacío
no miraré atrás.

[Cronos]

Me gusta, rebelde y profundo. Aplausos.

[Sumiciu]

Bonito, si señor.