
La falacia del espantapájaros es una violación de las normas de la lógica que consiste en falsificar la posición del adversario para luego atacar esa representación.
Por fin se ha acabado la espera y yo estoy pero no estoy, tengo la mirada perdida en la acera donde los sueños se convierten en mermelada de fresa que luego ha limpiar el servicio de limpieza de tu ciudad. Y el sol de la mañana salpica esas mismas aceras que han devorado tantos sueños, ilusiones y penas, y los pocos que sobreviven a la madrugada no cesan de buscar para no encontrar nada en esta ciudad. En esta ciudad hay dos clases de personas: los que buscan lo que no existe y los que saben que no encontrarán. A unos la suerte les abandona y los otros no la han conocido jamás.
Algunas veces me arrastré por el barro y otras veces volé demasiado alto y al final sólo quedan recuerdos, después de todo, nada, decía un amigo, resumiendo. Dicen que al final el tiempo pone las cosas en su sitio: tú yendo a buscar tus sueños y a mí todo vuelve a darme lo mismo. Tantos años esperando lo que nunca va a suceder, te puedes fiar más del diablo que de una mujer. Me alegro por tu nueva vida, de verdad, que te vaya bien, yo me conformo con no volverte a ver.
Las canciones son de colores y ésta es una canción azul, de hecho es más azul que canción ni blues, ni soul, ni rock?n?roll. Una canción azul, como mis dibujos, como los pitufos, como el cielo azul. Una canción azul, como las paredes de tu habitación, como la casa de Duncan Dhu. Como el gato que está triste y azul,1 como a los ahogados que se les pega el color mar,2 azules como los neones de los clubes que brillan en las calles mojadas de esta ciudad. Una canción azul, como la tristeza de Picasso, como el pájaro azul.3 Una canción azul, no tan buena como la Tahúres Zurdos pero igual de azul, o más aún.
A contrarreloj, toda la puta vida a contrarreloj, y siempre igual, a contrarreloj, horas, minutos y días a contrarreloj, años que no dejan de pasar. A contrarreloj, siempre con prisas a contrarreloj, y mal consejo dan a contrarreloj, el tiempo es la divisa a contrarreloj, y el dinero su voluntad. Siempre corriendo para nunca llegar, cuando hayas muerto tal vez descansarás. Recuerdo que tenía prisa por crecer, tanta prisa y para qué? Ahora sigo igual y sé que no hay donde escapar.
Es de noche pero ya amenaza el día, yo cojo la guitarra en mi habitación mientras afuera el mundo gira buscándole un sentido al dolor. Tantas guerras y tanta miseria y tantas mentiras en televisión como en tu vida: tantos problemas sin solución. Es de noche todavía pero el día está al caer, seguir con vida ya es un acto de fe. Y cada día se suicidan en tu ciudad un par o tres, si pudieran hablar las vías, si hablara el puente aquel donde tanta melancolía se ha dejado caer, donde tantas veces la locura ha vencido a la vejez.4 Nadie habla de los suicidas porque no molestan una vez se tiran y en televisión no lo cuentan porque si no se suicidan más. Es éste el precio que hemos de pagar? El triunfo de unos pocos a costa del fracaso de los demás? No se dan cuenta, nunca entenderán: Si no llegamos todos nadie podrá llegar.
No sé qué contarte. No sé qué decirte. Éste es el camino que tú escogiste y ahora estás sola, pero no estés triste, al fin y al cabo, ya eres libre. Ya tienes lo que quieres, lo conseguiste, a mí se me hace tarde, he de irme. Ya he esperado demasiado un imposible, ahora sé que tú jamás te lo creíste. Tú nunca creíste en nuestra relación y esperado tanto a que el tiempo me dé la razón que la vida se me ha escapado como arena entre los dedos de las manos mientras he visto como tus planes se ejecutan a la perfección. Y me pongo triste, no hay solución: Tanta mentira, tanta puta, tanto secreto, me cago en dios! El respeto se gana donde algunos pierden el honor y si una vez no lo prueba, que sean dos.
Tengo más dolor que un desierto arena, más frío que un muerto, más penas que una calavera. Tengo más rencor que resplandor la luna llena, más que olas tiene el mar, más que el cielo estrellas. Tengo más amor del que te cabe en el cuerpo, del que te quepa en esa alma que vas malvendiendo. Tengo más pasión que un niño tiene sueños, más que tic-tacs un reloj, más que llamas el infierno.
Ojalá hubiera paz en el mundo. Ojalá hubiera donde escapar. Ojalá encontráramos el rumbo Ojalá supiéramos navegar. Ojalá la cadena de los segundos encontrara por donde quebrar. Ojalá el océano más profundo no sea el de las lágrimas de la humanidad. Ojalá, ojalá, ojalá? Sueños de hojalata, nunca se cumplirán. Ojalá quedara algo más que soñar con libertad. Ojalá la vida fuera algo más que buscar y no encontrar. Ojalá pudiera olvidar. Ojalá que no llegue el invierno. Ojalá brille la verdad. Ojalá hablaran los muertos.
Ya ha salido el sol y alumbra el campo y aún sigue en pie el espantapájaros, los brazos en cruz en su calvario y la mirada en el horizonte, oteando. Ya ha salido el sol, el gallo y su canto y aún espera el espantapájaros y un par de cuervos bajan pa?acompañarlo, pa? sacarle los botones mientras siguen graznando. Me has convertido en un espantapájaros pa' que no pueda correr cuando me echas los galgos y ahora soy el hombre paja y va a pasar tiempo hasta que vea otra raja. Es que salen muy caras, de verdad, no me quedan ganas. Has de saber que no se puede tener nada y para eso es mejor no tener nada, que perder. No tengo nada que perder, salvo la vida y eso seguro que lo perderé, no hay más salida. Lo que tengo no lo sé, sólo sé lo que tenía y lo que jamás tendré, sólo tengo melancolía. La puta melancolía.
Cuántas veces me has mentido? Y luego me pides que vuelva a confiar. Una mujer sólo pide tu confianza para volverte a traicionar. Cuántas veces hemos discutido? Y el tiempo me ha dado la razón, aunque tú no lo hayas reconocido, dime, cuánto más necesito para ser dios?5 Y ahora estoy aquí perdido, ya sólo espero a que salga el sol, tal vez ilumine el sendero, el camino de vuelta a mi yo. Cuánta paciencia he malgastado para no llegar a ningún lado, si la vida es una pena a la que nos han condenado yo debí ser muy, muy, muy, muy malo. Cuántas veces se me ha ido la lengua? Cuántas veces se me han ido las manos? Cuántas veces he deseado ser una piedra? No se me da bien lo de ser humano. Y tú cuántas veces me has engañado? Cuántas veces te engañé yo a ti? Y ya hace demasiado que dura el engaño, habrá que ponerle fin.
Si se fumara la arena de la playa, si se bebiera el agua del mar y subiera como la marea, entonces, tal vez, me encontraría en mi lugar. Si los castillos de arena vieran salir el sol un día más, sino todo se vendiera, tal vez querría comprar. Y mientras tanto sigo buscando, sabiendo que no voy a encontrar. Si se puede decir que algo, más que buscando, estoy soñando con encontrar.
Hay una corriente y un viento y un mar siempre en movimiento y nosotros somos témpanos a la deriva porque el agua se hiela de estar tan fría. Y el agua se crece ante el frío, se endurece y forma castillos que viajan desafiantes como helados navíos fantasma, hacia el olvido. Un viaje a ninguna parte, adonde se encuentre el destino. La paz puede encontrarse bajo las olas de un mar embravecido. Querría derretirme en el mar del que he salido, ser ola, ser mar, ser viento enfurecido. Y a la vez ser nada, ser paz, ser vacío: Una lágrima más en el mar del olvido. Pero sólo somos témpanos de hielo a la deriva, sombras que recorren una noche fría en un viaje por las insondables aguas de las desesperanza y la melancolía.
La tristeza se hiende en la carne y va formando el surco de los años sobre las venas de cansadas de ver pasar la sangre como se cansa de las olas el océano. Como se cansa el cielo de las nubes y la tierra de los árboles que hienden las raíces en su carne y van formando un surco con los años. La vida va formando surcos y los surcos son caminos,
y si todos los caminos llevan a roma entonces es que está escrito el destino y el tiempo no perdona, nos lleva como el viento a los barcos de vela, a donde quiera, a donde quiera? Y los barcos del vela van formando surcos en el mar como forman surcos las lágrimas del mar en la arena. Caminante son tus huellas el camino y nada más, caminante no hay camino sino estelas en la mar.6
Ay, amigo! Qué putas son las mujeres! Te roban, te son infieles y luego dicen que te quieren. Y las niñas lloran y se ponen tristes, no hay príncipes para las putas ni de qué arrepentirse. Simplemente adormecer la conciencia hasta notar sólo su ausencia, hasta que duerma, duerma, duerma, duerma? Sin haberse nunca despertado. Como en el carné estamos plastificados: la comida plastificada, el sexo, plastificado, las mujeres, plastificadas. Plastifícate! Aún no te has plastificado? Todo está plastificado Las drogas, plastificadas, los sentimientos, plastificados. Todo lo envuelve el plástico de la hipocresía como la muerte envuelve a la vida. Yo mientras pueda prefiero seguir pensando en la muerte como el orgasmo más largo. Todo lo envuelve el plástico de la mentira, sólo espero que no haya más plástico después de esta vida.
Qué infinito es el cielo y qué inescrutables los ojos de una mujer, al final, la verdad, es que la verdad nunca la podrás conocer. Ahora que has dejado de llorar a mí me empieza a doler, tantos años peleando, yo esperando sin saber a qué. Pero tú sabías bien que hacer, acabar tus estudios, mientras tuve más que tú estuvimos juntos y después, hasta más ver. Unos cuantos años, casi diez. Dime, para qué? Y ahora qué? Tendrá que ser el plan b, va a hacer falta fe. No tienes el valor para decirme la verdad a la cara, en realidad nunca has esperado de mí nada. Has sido la peor persona que he conocido, tú ve mundo y luego compara. Y eso que no sé de la misa la mitad pero es que de ti ya no quiero saber más, tal vez tengas razón, tal vez estés equivocada, el tiempo dictará sentencia, serás juzgada y veremos los miedos de quien tenían razones más fundadas. Que la vida te trate bien, tan bien como me tratabas.
Tengo un infierno en la cabeza, un desierto ante los ojos, un abismo bajo los pies. Tengo tanta tristeza, tengo el alma partida a trozos y el corazón lleno de hiel. Tengo sólo una certeza y es que como todos los otros nunca llegaré. Tengo el alma a piezas, pedacitos rotos de un puzzle por recomponer. Y tengo la delicadeza de no romper tu foto aunque no te quiera ver. Cambiaré por tekila la cerveza y en el bulevar de los sueños rotos,7 por cada duda beberé. Beberé como el que reza, beberé como un devoto en busca de su fe. Cerraré los ojos bajo las cejas y poco a poco, dormiré.
Soy sólo un iluso que no verá cumplida su ilusión, soy un poco obtuso, el mundo me enseñó a verlo todo difuso y claro como el sol, hasta ver incluso naves ardiendo más allá de Orión.8 Como un recluso desde la celda de mi habitación, he sufrido mucho, a veces creo que sólo soy dolor, como el poeta, un fingidor que finge tan completamente que hasta finge que es dolor, el dolor que en verdad siente.9
Una puñalada eterna para el guionista de mis pesadillas. Para mi hermano muchos recuerdos del pasado. Para mi madre dos interrogantes. Para mi padre un interrogante y una exclamación. Para mi exnovia las mil noches de gloria que conmigo nunca vivió, una sola lágrima y una respuesta: no. Para la perra una canción que la entretenga cuando no esté yo. Para los jabalíes del parque una vida mejor. Para el cielo mil gritos en busca del infinito. Y para la ciudad más humo y más luces rutilantes, más sueños que no llevan a ninguna parte. Para mis amigos la oportunidad que no tuvieron de haberme conocido. Para la gente mil esperanzas que jamás se cumplirán. Para los que he encontrado follando en este parque público un piso y un poco de dignidad. Para dios un lento arqueo de cejas. Para todas las cosas un sentido que nunca llegarás a vislumbrar. Para mí un aullido largo, largo, casi sin final, tal vez encontrar algún lugar. Para el viento mis recuerdos, mis sueños de libertad y que mi cuerpo, mis despojos, mis cenizas, sean para el mar. Para este poema un título: testamento. Y para estos versos, un punto final.
Otra tarde inaguantable, el teléfono no suena y lo más desagradable es que es peor si lo hiciera. Perdona que no te hable, perdona que no vuelva a verte, disculpa si no me siento culpable por no creerte. No es fácil creer en alguien si alguna vez te miente y todos mienten menos nadie, para ti, señor don nadie. Y perdí por el camino todo en lo que he creído y ahora no me queda nada más que esperar a mi destino. Y la ciudad es un desierto, un desierto de cemento donde corazones sin alma buscan sin encontrar sus sueños. Y así ha pasado el tiempo, al final me he hecho viejo, dime que queda de tus sueños cuando te miras en un espejo. Tantos no los soportaron, tantos no quieren hacerlo, otros nos conformamos con contar nuestro cuento negro.
Sólo conoció el fracaso pero no le gustaba perder, sabía que nada estaba en su mano, que no había nada que hacer, tenía muy claro que todos estábamos condenados y se conformaba con ver el mundo arder. Él quería irse de aquí, quería largarse, no sabía adónde ir pero sabía que sería más pronto que tarde, aunque no tenía prisa, no le esperaba nadie, el sólo quería ser indomable. Carretera veloz a ninguna parte, jugarse la vida es mejor que suicidarse y sobre el asfalto van quedando recuerdos, vamos, deprisa, que no nos alcance el tiempo. Y para su desgracia lo sueños se siguen hasta muy lejos, para no volver, no es la valentía si no el tiempo lo que no nos permite retroceder y después de mucha carretera, mucha calzada y mucho arcén recordó que él sólo quería ser? No quería perderse en ninguna mujer, sabía que todos los besos al final se tornan en hiel y sólo quería volar alto, alto? para dejarse caer. Como todos los jóvenes vino a llevarse la vida por delante 10pero como tantas veces la vida se lo llevó a él y eso que él nunca creyó en la muerte pero la muerte si que creía en él.
La luna llena es como una ventana abierta en la madrugada por la noches brillan las luces y alguien sueña mientras la gente descansa para mañana y el mañana es una cosa muy jodida que te quitará todo lo que quieres, hasta la vida. Pero la noche es cálida y la gente se desea, justo antes de llegarse a conocer, pero nunca después. Mi vida descarrila nada más salir de la estación no encuentra vías que lleven a donde voy yo. Pero los aviones aterrizan y el mundo gira igual que las manecillas del reloj. Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar11 y para pasar aún queda, paciencia, mira hacia el mar, ese mar que se retuerce indolente y dime que ves bondad. Aquél crío de nueve años sólo leyó en la cara de Bukowski12 pero llevaba razón igual. Supongo que sólo se ve lo que se puede soportar y algunos un poco más. y la luna se apaga hasta mañana, eso tan jodido que nos arrebatará las vidas como la luz del día.
Soy un perrillo solitario, un lobo estepario usureando por las calles de esta ciudad. Soy sólo un recuerdo amargo deambulando, que no encuentra donde descansar. Soy tiempo perdido en letargo a merced de las olas del océano que no llevan a ningún lugar. Tanto tiempo buscando la belleza y el infinito se tiñe de azul sobre nuestras cabezas. Soy muchos pude haber sido pero al final soy yo el que escoge mi camino. Sólo soy un pasado atragantado, cicatrices que murmuran, que susurran, que dicen, que exclaman, que gritan, que profieren alaridos y vomitan charcos de sangre al ritmo tranquilo pero decidido de un corazón desafiante. Estoy herido. He perdido casi todo lo que pueden quitarme. En realidad nunca lo he tenido, fue una ilusión, un sueño, y ahora esto despierto y no quería despertarme. Soy mucho mejor persona dormido a no ser que sueñe algo desagradable porque pesadillas he tenido tantas que no vale la pena contarte. Seguro que no has querido nunca quedarte dormido y no volver a despertarte?
Hay un sitio en Barcelona donde todavía brilla alguna estrella, fluyen sin prisas las horas y se asoma la luna llena. En el parque hay muchos gatos, hay jabalíes y jabatos y parece ser que alguna gente también se suele querer. Y acaban de venir unos con unas linternas, no sé si eran policías pero han dado media vuelta y como Lou Reed canta no los he vuelto a oír, quizás vengan a ver algún jabalí. A mí me dan bastante miedo pero al fin y al cabo es compañía, son animales buenos, no se meten en tu vida. En el parque del jabalí la naturaleza vuelve a tomar lo que le pertenece, unos encuentran un lugar donde follar al fin y otros encuentran la paz que se merecen. Pero en realidad nadie es feliz, ni siquiera hay esperanza para el pobre jabalí, el bar, la ciudad, le roban la montaña y no tendrá donde vivir.
Un juguete roto, un muñeco sin ojos en el cajón de las fotos con los recuerdos que a veces pienso es mejor olvidar. Pasa el tiempo pero sigue doliendo recordar. Y las sonrisas y las miradas tatuadas en un trozo de papel que no hace más que doler. Y el pensamiento me come por dentro sin encontrar un recuerdo, un solo recuerdo de felicidad, me duele hasta respirar. Uno acaba por verlo todo negro, soy un enfermo y no hay remedio para mi enfermedad, mi enfermedad se llama realidad.
He aguantado lo que no ha aguantado la mayoría de gente. Me has escupido, me has insultado y te marchas de mi lado para siempre. Me he tragado tus mentiras aunque ni tú te las creías, que tengas suerte. Y así paso los días, a la deriva, contracorriente, porque soy el rey de la contradicción. Quiero ser libre en una cárcel, estoy buscando pero sé que no encontraré a nadie, querría ser inmortal, tal vez matarme, ser ola del mar, cálida ráfaga de aire.
Para qué tengo manos sino sé qué hacer? Para qué tengo pies si no sé donde ir? Para qué tengo nariz si no te puedo oler? Para qué tengo ojos si nada quiero ver? Para qué tengo un cerebro sino quiero pensar? Mejor un cráneo hueco, eso es olvidar. Para qué quiero pareja si no puedo confiar? Para qué quiero esperanza si no hay nada que esperar? Para qué tengo una guitarra si no la sé tocar? Para qué tengo una vida que no sé disfrutar? Para qué tengo una polla sino tengo con quien follar? Para qué tengo que vivir en un mundo hecho tan mal?
Estoy jodido. Qué dolor! Muy jodido. Do, re, mi, fa, sol. Mi novia se ha ido, me dejó, por otro tío que toca mejor que yo. Mi novia se ha ido, me abandonó, por otro tío que se la folla mejor que yo. Mi novia se ha ido, se largó, su padre le ha prohibido que hable con ese cabrón. Mi novia se ha ido y yo aquí estoy, con mi cara de primo y sólo se me ha ocurrido hacer esta canción. Y no estoy borracho, no lo suficiente para tener ganas de volver a verte.
La verdad no existe en los labios de una mujer, existe el dolor, también existe el placer, existe el veneno y existe la hiel pero la verdad no existe en los labios de una mujer. La vida es el réquiem por un sueño, un largo paseo por el infierno, por la decadencia de este mundo enfermo hasta que se nos lleve el viento. Historia triste, siempre acaba mal. Historia triste, el cuento de nunca acabar.
Siempre a contracorriente, siempre a contrarreloj, siempre a contra viento, siempre en contradirección. Siempre contratiempos, siempre contra la pared, siempre contra el suelo, siempre contra toda ley. Siempre hasta la muerte, siempre hasta el final, siempre para siempre, hasta nunca jamás.
Había una vez un barquito chiquitito, había una vez un barquito chiquitito, que no sabia, que no podía, que no podía navegar, pasaron un, dos, tres, cuatro , cinco, seis semanas, pasaron un, dos, tres, cuatro, cinco, seis semanas, y aquel barquito y aquel barquito y aquel barquito navegó. Había una vez un barquito chiquitito, metido en un frasquito de cristal que nunca había visto el mar.Y si esta historia os parece corta, volveremos, a empezar.13
1. Roberto Carlos?
2. BSO Barrio
3. Bukowski
4. En las calles de madrid, Loquillo
5. Jesucristo García, Extremoduro
6. A. Machado
7. J. Sabina
8. M-clan, Blade Runner
9. F. Pessoa
10. No volveré a se joven, Loquillo/Jaime Gil de Biedma
11. Cantares, J. M. Serrat/A. Machado
12. Conocí a un genio, Bukowski
13. Clásicos populares
