A cencerros tapados

[Naide]

Estuve ahuecando los cencerros
que fueron tapados sin lujos,
estuve como cortina de humo,
y aquí me tienes, sincero.

Ahora soy el que se pierde
en la fachada de tu voz,
y siempre juego en tu vientre,
con cosquilleos de hormigón.

Estuve afilando mi garganta
que parece cantar sin brío,
estuve cardando los hilos,
y aquí me tienes, sin lana.

Ahora soy el que se cuela
en vidas de noséquién
y siempre soy marioneta
que manejas a tu merced.

Y si nos dejan cortas las riendas,
vuelve la grupa, estamos cerca.
Y si recoges lo que sembraste,
bozal de satén, el elegante.

Estuve tirando los papeles
que escribí de noche borracho,
estuve pisando a los charcos
y aquí me tienes, inerte.

Ahora soy el que dibuja
corazones en las esquinas,
y siempre tengo la culpa,
de no alimentar tu sonrisa.

Y si dejan de brillar tus ojos,
raído el trapo, que los froto.
Y si quiero curtirte la piel,
manos de lija, pa'l después.

Estuve deshaciendo el macuto
que llené con lo que me sobra,
estuve descosiendo la ropa,
y aquí me tienes, desnudo.

Ahora soy el que marchita
las flores que hay en tu jardín,
y siempre trago saliva,
cuando tengo algo que decir.