A veces soñaba.
Sí.
Soñaba despierto.
¿Cuáles eran mis sueños?.
Caminar, simplemente. Tropezarme. levantarme
Sonreir y caminar.
No se.
Entonces era todo tan vivo.
Ahora,
dudas y más dudas.
¡Ya ves!.
¿Tanto hemos cambiado?.
Antes el peligro no era tal.
Tampoco la tristeza, fíjate.
Tal vez fuera el eco
O un rumor lejano.
Un no, creía yo.
Un no que nunca fue.
Tan sólo un hasta luego.
Porque una vez fui un hombre feliz
¿no te das cuenta?
en un gesto,
una mirada,
un sí quiero.
Perdona,
sigo soñando.
Sueño que soñaba.
Dame un minuto.
Ya.
¡He despertado!.
A ver?
¡Ay!.
Siento añoranza.
Añoranza de un susurro,
una caricia,
un beso.
Añoranza por ver y escuchar.
Añoranza en las palmas de mis manos.
Aún así te alejas.
¡Vuelve!, ¡vuelve!.
Imposible.
¡Ay!.
Vaya. Ha sido tan sólo un sueño.
Ahora es noche cerrada.
Cae la inmensidad.
No te imaginas como duele.
Como oscurezco con cada palabra, en cada recuerdo.
Recuerdos que me abrazan, me aprietan, me asfixian, me ahogan.
Por favor, despiértame.
¿Qué locuras digo?. Si ya no estás.
Mira.
Alargo mi brazo y toco el vacío.
Silencio.
Nada. Nada.
Todo normal.
Lo siento, cariño.
Mejor vuelvo a dormir.
Tan sólo ha sido una pesadilla más.
De un hombre feliz, hace mucho tiempo.
P.d.: Gracias por tus consejos, Vicky.
