Arrimate a la orilla de mi brazo
que hoy se extiende como nunca para ti
y se siente tan ligero como un barco
que navega en la locura de vivir.
Hoy contigo y mañana sin mi,
conun as en la manga
que hoy tampoco se atreve a salir
y tres filos de un solo hacha
que me van cortando en relenti.
Observan como pintan las murallas
en las que te jure no jurar jamas,
mas hoy, te juro por mi alma
que hay dos ojos que ya no miran para atras
y tres pares de cojones que no se cansan
de amarte como nadie te sabra amar.
ESE BESO ES MIO
Tal vez me siento como aquel remo sin agua
que buscaba un rio para poder nadar
o como aquel pobre pirta que se cortó la pata
y buscaba una de palo para volver a caminar
y en cuanto le crecio la barba,
pobre loco, juró no volverse a afeitar.
Y tu princesa ¿donde olvidaste
aquel beso que me ibas a dar?
¿tal vez, incredula, pensaste
que mi locura no se iba a acordar,
ni juraria por su vida buscarte
hasta donde estuviese seguro
de no poderte encontar.
Ese beso es mio.
ESE BESO ES MIO
Arrimate a la orilla de mi brazo
que hoy se extiende como nunca para ti
y se siente tan ligero como un barco
que navega en la locura de vivir.
Hoy contigo y mañana sin mi,
conun as en la manga
que hoy tampoco se atreve a salir
y tres filos de un solo hacha
que me van cortando en relenti.
Observan como pintan las murallas
en las que te jure no jurar jamas,
mas hoy, te juro por mi alma
que hay dos ojos que ya no miran para atras
y tres pares de cojones que no se cansan
de amarte como nadie te sabra amar.
Tal vez me siento como aquel remo sin agua
que buscaba un rio para poder nadar
o como aquel pobre pirta que se cortó la pata
y buscaba una de palo para volver a caminar
y en cuanto le crecio la barba,
pobre loco, juró no volverse a afeitar.
Y tu princesa ¿donde olvidaste
aquel beso que me ibas a dar?
¿tal vez, incredula, pensaste
que mi locura no se iba a acordar,
ni juraria por su vida buscarte
hasta donde estuviese seguro
de no poderte encontar.
Arrimate a la orilla de mi brazo
que hoy se extiende como nunca para ti
y se siente tan ligero como un barco
que navega en la locura de vivir.
Hoy contigo y mañana sin mi,
conun as en la manga
que hoy tampoco se atreve a salir
y tres filos de un solo hacha
que me van cortando en relenti.
Observan como pintan las murallas
en las que te jure no jurar jamas,
mas hoy, te juro por mi alma
que hay dos ojos que ya no miran para atras
y tres pares de cojones que no se cansan
de amarte como nadie te sabra amar.
Tal vez me siento como aquel remo sin agua
que buscaba un rio para poder nadar
o como aquel pobre pirta que se cortó la pata
y buscaba una de palo para volver a caminar
y en cuanto le crecio la barba,
pobre loco, juró no volverse a afeitar.
Y tu princesa ¿donde olvidaste
aquel beso que me ibas a dar?
¿tal vez, incredula, pensaste
que mi locura no se iba a acordar,
ni juraria por su vida buscarte
hasta donde estuviese seguro
de no poderte encontar.
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