Eneko levanto su mirada del suelo, miró con cara pálida y soltó su cigarro, dio media vuelta y empezó a correr como si perdiera el alma en ello.
Gotas de sudor frió recorrían su cara, mientras a lo lejos oía como la jauría le gritaba: ?¡Matar a ese cerdo!?.
Las fuerzas del punk iban decayendo, cuando de repente sintió un golpe en su vientre. Eneko cayo al suelo y sin darle tiempo a reaccionar sintió como miles de insultos y golpes que magullaban su cuerpo.
Después del maltrato que sufrió, los bárbaros pararon en seco y uno de ellos cogió la cabeza de Eneko, le abrió la boca y le hizo morder el bordillo. El skin levanto su bota militar y.... ZAS¡¡¡. Sus ojos rojos y su mirada fija en la acera.
Un solo golpe había terminado con su vida, un solo golpe se lo llevo por delante.
