siempre hay piedras

[victor goti]

Purgo con pico y pala
mi conciencia.
Que no nos quedan balas,
pero tampoco clemencia,
y siempre hay piedras
para hacer una pared.
Y tijeras para cortar la hiedra,
y para pescar sirenas siempre hay una red.

No creas que hoy paso de paso,
que cuando termine mi vaso
puede que no me quiera marchar.
Dices, ¿tú? Que esto es un fracaso,
que ya dormí al raso,
qué me vas a contar:

de noches de rencor y frío,
donde lloran los cobardes en un portal
echo de cal y hastío,
cuando ningún beso era mío,
pasando los excesos con limón y sal.

Y sal de tu encierro mi vida,
que sangran las heridas,
que se agrandan los caminos que andar.
Que el destino nos envida.
Que la mano no está perdida,
que, por favor, te sientes a jugar:

y hagamos capas con las banderas
y mapas con las quimeras
y sueños con la realidad.
Y prendamos las fronteras,
organicemos fiestas en las esperas
y conciliemos justicia y libertad.

Y bebamos de las manos del alma,
y tomémoslo con calma,
y sepámoslo llevar.
Que si nos cortan los pies, nos salen alas.
Y el cielo se vestirá de gala
al vernos llegar.