EL PERRO, EL HOMBRE Y LA SERPIENTE
Os voy a contar una historia de una serpiente que se había enamorado de un perro. Una relación muy difícil y a no decir, imposible.
El perro, fiel a su amo, siempre iba con el y uno de esos días que su amo lo saca a pasear, lo lleva al pequeño bosque que hay cerca de la casa.
El amo, un hombre viejo ya, se sentía cansado de la vida que llevaba. Siempre trabajando para otros sin ver fruto a su labor. Hombre bueno, no le gustaba hacer mal ni dañar a nadie.
Al bosque siempre había asistido solo. Sin su perro, ya que también le gustaba disfrutar paseando así. Otra de las razones era que lo pasaba bien viendo los movimientos sinuosos de una serpiente. No se lo había contado nunca a nadie, ya que sentía vergüenza si alguien se hubiese enterado y reído de él.
Ese día, al oír sus pasos salio la serpiente a su encuentro y cual fue su sorpresa cuando quedó prendada del perro. En ese momento, la serpiente hizo despliegue de todos sus encantos, con los que termino de cautivar al pobre hombre, pero no al perro.
Fueron muchos los intentos de la serpiente por enamorar al perro, que se resistía. Ella no se desmoralizaba. Un buen día, el hombre hablo con su perro para pedirle opinión sobre las intenciones de matrimonio con la serpiente. El perro, pensando que así se quitaba a la serpiente de encima, le dijo a su dueño que era lo mejor que podía hacer si eso lo hacía feliz. No le contó lo de las insinuaciones de la serpiente que se convertiría en su nueva ?dueña?.
El buen hombre sin perder tiempo fue a pedir matrimonio a la serpiente, que acepto la petición al momento.
La boda se celebro por todo lo alto. El amo, renuncio a su buena reputación por tener a la serpiente. Se pensaba que ella le quería.
El perro, lo celebro. No sabiendo como aceptar que la serpiente se casara con su dueño. Por un lado, su dueño estaría contento y feliz de llevar a término sus deseos y por el otro, ella iba a estar más cerca de él de lo que había pensado.
La serpiente, conocedora de todas las artes, afino bien sus dientes. Un buen matrimonio siempre aporta beneficios y este, en especial, los aportaría todos. Tendría una buena casa, dinero y al perro como mascota?y se las apañaría para salir a pasear con este sola?
El matrimonio, en este caso, era como un pacto firmado por ella. Había una meta que cumplir? ¿Cuánta paciencia puede tener una serpiente en estos casos? ¿El buen hombre se daría cuenta alguna vez de las intenciones de la serpiente?. Y el perro ¿Seguiría siendo fiel a su amo?
Con el tiempo, la serpiente mordió a su marido contagiándole su ambición. Su máxima preocupación sería el dinero.
El perro, el hombre y la serpiente
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