Un relato: El último trago

[Treintagenario]

EL ÚLTIMO TRAGO

Intentó despertarse. No era fácil. La cabeza le dolía un poco más aun que las otras veces. Era como si le estuvieran dando patadas en la frente desde dentro. Lo intentaba, pero no era capaz de salir de ese estado de ensoñamiento, tenía la cabeza demasiado espesa...


Poco a poco consiguió ir despejándose. Todo le olía a cerveza y el dolor iba en aumento. Ahora era ya como si un elefante se hubiera sentado encima de el.

Empezó a notar una sensación extraña. Estaba mojado, bueno, mejor dicho, completamente empapado. De hecho, tenía medio cuerpo dentro de un gran charco o sabe Dios lo que era.

¿Donde estaba?
Había muy poca luz y era una luz como distorsionada, de un color marrón. Lo único que veía era agua por todas partes que, ahora puesto de pie, le llegaba hasta las rodillas.


Estaba completamente desconcertado, no sabía si estaba soñando pero no era probable por el tremendo dolor que sentía. Como siempre no recordaba nada de la noche anterior.

Esta vez se había pasado. ¿Adonde demonios había ido a parar? Quizás estaba alucinando por la borrachera. Ya le había pasado otras veces pero nunca tan real, y aparte, siempre había sido durante la borrachera y no durante la resaca.

Decidió empezar a andar. Le dolía todo el cuerpo a cada paso. Se encontraba fatal, completamente destrozado. Tenía el estomago hecho polvo y esta vez el olor a cerveza era pero que nunca. Todo el charco de agua por el que andaba le olía a alcohol de una manera impresionante.

Definitivamente, se había pasado la noche anterior. Empezó a decirse a si mismo, como otras muchas veces, que iba a ser la última vez, que la de aquella noche iba a ser su última borrachera, su último trago.

De repente, chocó con algo!! Que era aquello?
¡Una pared de cristal o algo parecido!!! ¡Eso explicaba la luz distorsionada!!

¿Pero donde diablos estaba?
La cabeza le empezó a dar vueltas, su mente se nubló un poco mas....¿ Donde se había metido? ¿Que había pasado?

Consiguió calmarse un poco y empezó a pensar que tenía que buscar una salida.
Comenzó a recorrer la extraña pared poco a poco. Ahora parecía que le estuvieran pasando el cerebro por una trituradora.

Llevaba ya un buen rato caminando y no había señales de ninguna puerta y la pared parecía no acabarse nunca.

La ansiedad fue apoderándose rápidamente de el. Empezó a hablar solo:
- Tengo que salir! tengo que salir, tengo que salir... - repetía incesantemente.

La ansiedad dio paso a la desesperación. Ya no hablaba, gritaba con fuerza. Se derrumbó, cayó de rodillas en aquel charco pringoso, gritando como un poseso:

- TENGO QUE SALIR DE AQUÍ!!! NECESITO UNA SALIDA, JOER, TENGO QUE SALIR!!!!

Su mente se iba hundiendo cada vez más y más, su cerebro empezaba a bloquearse por completo.

De repente, todo comenzó a temblar como si estuvieran levantando del suelo el habitáculo donde estaba.

Miró hacia arriba y vio algo a través del vidrio, agarrándolo.

¿Dedos? ¡¡¡Parecían dedos, dedos de un tamaño descomunal!!!!

Y entonces lo vio. Tuvo un escaso momento de lucidez y comprendió todo ante aquella gigantesca y horrible visión.

Vio su cara, enorme y deformada por el cristal, y por el alcohol, la miseria, la suciedad.... y lo entendió...

La histeria se apoderó de el por completo. Gritó, chilló, pataleó, lloró....

- ¡NO LO HAGAS! ¡NO BEBAS! - vociferó entre sollozos.

Era demasiado tarde. Aquella mano gigante había acercado la botella de cerveza hasta la gran boca, que era la suya.

Fue arrastrado inexorablemente.
No encontró absolutamente nada a lo que agarrarse.
Ni siquiera su vida pasó ante sus ojos, ya que no le quedaba ningún recuerdo, ningún amigo, nada...

A nadie le llamó la atención el pequeño articulo que decía: " Encontrado muerto en un callejón un vagabundo alcohólico".

FIN

[kaperuzita]

Me gustan los relatos que desnudan la miserable condición del hombre.
En serio, me ha gustado muxo.

[Treintagenario]

Me alegro de que te gustase.

Lo escribí hace mucho, unos doce o trece años, y le tengo cariño.

[Vicky-tripi]

Gran relato!!!. la suciedad de la sociedad , no es tal a veces es cuestion de mala suerte. Eh?

[Treintagenario]

Gracias, Vicky

A veces son las circunstancias, aunque también influyo mucho uno mismo y sus actos.

[ina...]

(no lo habia leido, ultimamente tengo este subforo un poco abandonado...)

a veces uno no consigue salir del infierno que se ha creado....o del infierno que le tocó vivir...

[Treintagenario]

Cierto, Inaina

Este relato salió pensando mas en infiernos creados por uno mismo, y por no poner los medios para salir a tiempo

(no es una experiencia propia )