Último destino

[Canijilla]

Poco aliento me queda ya en el pecho
que me insufle algún resto más de vida.
Mis minutos se apagan sin medida.
mis segundos perdieron su derecho
y mis horas pasean sin provecho
hurgando en los dolores de mi herida.


Sólo quedan instantes de futuro
marcándole al reloj de la agonía
esa incierta y chirriante melodía
del momento final de mi seguro.

Ni siquiera me quedan los recuerdos
que puedan mitigar con sus latidos
los amargos y tétricos sonidos
de mis pulsos tan torpes y tan lerdos.

Me sacude un intenso escalofrío
cuando contemplo que mi escaso río
decubre sin rubores su velorio
dejando en las orillas mi albedrío
y en el ánimo el espasmo mortuorio
de mi triste e iluso desvarío.

Pensar lo que seré no me amilana,
pues nunca tuve miedo del Infierno
ni pedirá jamás al Cielo Eterno
que medie en su clemencia sobrehumana.

Pero en cambio, me aterra el fin amargo
del último destino de mi verso,
si volando sin rumbo al universo
le impide despertar de su letargo.

[Cronos]

Olé. Aplausos, si señó.