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[fløyteHundore]

Sacudía tierra de mi pelo y veía llover en mis zapatos. La escarcha del silencio confundía al temblor ingenuo del enamorado trasladándolo al humeante valle del deseo. Soñaba en blanco y negro con andar sobre ruedas, que el viento guiase mi proa hasta alcanzar la ilusión, cambiaba arena por asfalto y espuma por semáforos. Entre adoquines inflaba mis velas creyendo que el dióxido haría de este viaje un lento reposo para mi fatigado pensamiento. Oprimido y castigado, por andar, por llorar. Perdía mi hogar, abandonaba la calle. Barbas canosas cortaban alambres para ceñir cotas al pecho descubierto de la ilusión. Espacios fragmentados por la visión de aquel que trata la vía con menos atención que Onán sus labores. Manos sucias y ojerosas alzarán las tablas de la discordia sobre un Sinaí de artesana piel desértica. El fuego de la basura será la señal, la única salida. Dios da crédito a mi fe con botas y cascos uniformados, ya no había vuelta atrás. Putas y pintores en primera fila de la lucha, de la resignación falaz de quien como casa tuvo cemento y estrellas y sol como redención. Derecho a pecar, obligación de pensar. Sólo el ataque de calderos y pegamento devolvería la melodía prohibida. Lloraba por mendigar el derecho a la indigencia. Maniatado y abocado al enmudecimiento absurdo que olvida y castiga aún tras la muerte, siendo esta el último peaje a pagar por abatir al pastor injurioso. Volverán las piedras y oleré la sangre en un dulce almizcle de sudor y odio.

[psik0]

verborrea paranoica.
Mola

[Cronos]

sisi, mola.