El enemigo lleva el uniforme reglamentario
pero no es ninguna guerra
y es que no hay ninguna prenda
ensombreciendo las manillas de tu cuerpo.
Es otra entrega en otra alfombra
de esa luz que no se vende en bombillas,
de ese aire que te robo,
pero eres tú la que me ahogas...
Sabiendo siempre que hay que esperar
un final injusto
deduzco por mí mismo
que el infinito se creó para el reducto de tu piel
y hay que ver que cuanto más me acerco a ti
más luzco.
Y ya está, la rendición de los presagios
de nunca acabar,
y de los dos niños de nunca jamás ya no se supo,
se cumplió el cupo de promiscuidad,
por eso ahora solo ocupo el tiempo
en tocar más que en mirar.
A las puertas,
de salir más que de entrar.
A las puertas
-
- Mensajes: 84
- Registrado: Mié Nov 30, 2005 10:16 pm
¿Quién está conectado?
Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 3 invitados